viernes, 26 de noviembre de 2010

Sin nombre...



Quise buscar un nombre apropiado para esta entrada pero, lamentablemente no se me ocurrió ninguno. Ayer fue el día para eliminar la violencia contra la mujer. Tenía planeado escribir algo que se vio desplazado, por un momento, por el cansancio que me mando a dormir más que temprano.
Vivimos en una sociedad tan retrógrada que literalmente da asco. Lo siento si soy un poco cruda al escribir este post pero, este es un tema que causa gran impacto en mi; me imagino que por la foto del comienzo ya se habrán dado cuenta.
Hay tanto que tengo que decir que realmente no encuentro por dónde comenzar. Tuve mucho dolor en mi vida durante bastante tiempo. Tres años fui víctima de muchos abusos. Vivía entre peleas interminables, insultos y, uno que otro golpe. Y acepté todo eso por mi hijo. Ahora miro para atrás y odio lo que fue mi vida en ese entonces. Odio haber dejado a mis hijos expuestos a ese tipo de situaciones. Odio el daño que les causé por dejarme maltratar de esa manera. Hay tantas cosas que recuerdo como si fuera ayer.
La primera pelea que tuve con mi ex esposo está grabada en mi mente como si hubiera sido hace poco. Yo estaba embarazada y mi hijo mayor estaba enfermo. Lo habíamos llevado al médico la noche anterior con mis padres y nos había dicho que era alérgico a casi todo. Sería casi una sentencia de muerte que alguien fume dentro de la casa. Desgraciadamente esa mañana, ese ser y yo estuvimos peleando, y él para hacerme enojar sacó un cigarrillo para fumar en nuestro dormitorio, dónde mi gordo enfermo y yo (embarazada), también estábamos viendo televisión. Lo único que se me ocurrió hacer en ese momento fue arrancarle el cigarrillo de la boca y romperlo. Tal vez no fue la mejor reacción pero, no pude contener la rabia que sentí en ese momento al ver que irrespetaba de esa manera la salud de mi hijo, sin mencionar la de su hijo que aún no había nacido. Y, sin duda alguna, mi reacción no merecía lo que pasó después de eso. Dicen que una madre, en un momento de desesperación, puede llegar a poseer cuatro veces su fuerza normal, para defender a sus hijos. No sé de dónde saqué fuerzas para defenderme, porque en ese momento, histérico porque rompí su cigarrillo, él se abalanzó sobre mí y comenzó a ahorcarme. Sé que todo esto parece mentira pero, lamentablemente, fue algo que pasó en la vida real. Con todas mis fuerzas lo empujé y cayó sobre una pequeña escalera que teníamos en el cuarto. Se rompió la cama, se quebró un vaso. Él comenzó a golpear las paredes y las puertas. Trató de golpearme a mí.
Recuerdo que mi hijo estaba ensimismado sentado en la cama, viendo televisión, como que si no hubiera nada a su alrededor. Tenía sólo tres años. Cuando él salió del cuarto, pude coger mi celular y encerrarme en el baño para llamar a mi papá y que me recogiera. Mi padre salió corriendo del trabajo y cuando llegó a mi casa encontró todo desbaratado. Y a mi gordo viendo televisión como que nada hubiera pasado. Me fui con mi papá y en el camino recordé un presagio que me había hecho cuando dije que me iba a casar. Esa noche me dijo: “Cuánto apostamos a que no pasa ni un mes de que te vas a vivir con él y te pega”.
Y eso fue poco. La primera pelea siempre es la más suave. Después de eso todo va en declive. Tengo todavía grabada su voz diciéndome al oído en una pelea, cuando ya estaba de casi ocho meses: “Vamos para que abortes. Si quieres ahorita mismo te llevo para hacerte sacar esa cosa.” Muchas veces me eché la culpa de todo. Cuando comencé mis tratamientos y a medicarme me di cuenta que el problema no era yo. Tratamos de sacar adelante el matrimonio durante tres años. Vivimos con mis padres, vivimos solos, vivimos con los padres de él y al final vivimos en un departamento que nos construyeron mis suegros en la casa de ellos. Al principio, él no trabajaba, por lo que pensamos que, tal vez eso era lo que lo ponía de mal humor. Luego empezó a trabajar y los problemas siguieron llegando. Al final del matrimonio no quedaba nada de respeto, nada de amor, nada por qué luchar.
Muchas veces nos separamos y todas volvía con él. Después de haber sido madre soltera con mi primer hijo, no quería que el segundo pase la misma suerte pero, tampoco quería seguir exponiendo a mi hijo mayor a tanto sufrimiento. Así que cometí la mayor estupidez que pude haber cometido y fue dejar a mi bebé viviendo con mis padres. Y me fui. Con amenazas o con trucos, falsas promesas de que había cambiado, siempre me recuperaba pero, al final todo volvía a ser como antes. Las peleas cada vez se hacían más fuertes. Ya no le tenía miedo, los golpes ya no dolían. El odio, la rabia, los amortiguaban. Mi suegra muchas veces trató de meterse pero, recibió golpes también. Era mi hijo menor ahora el que presenciaba los rines de boxeo que se armaban en la casa. Incluso hubo alguna ocasión en que él trató de pegarle a nuestro hijo que, ahora tiene dos años.
Hasta que un día dije, NO MAS. Sé que suena como un cliché pero es verdad. Lo único que necesitaba era un empujoncito y supe exactamente dónde encontrarlo. Luego de una pelea monumental, ese ser, como era costumbre se fue a chupar al cumpleaños de un amigo, dejándome a mi encerrada con nuestro hijo, en la casa. Se llevó mi celular y se llevó mis llaves. Si hubiera habido alguna emergencia, hubiera tenido que salir por la ventana. Llegó casi a las cinco de la mañana. Aproveché que estaba dormido, cogí a mi bebé, empaqué lo que pude y pedí un taxi. Mis suegros salieron a ver qué pasaba, por qué me iba. Y lo único que pude hacer fue mentir para que no trataran de retenerme.
Lo que más odié de esos tres años de mi vida es que me convertí en la mujer que tanto detesté mientras crecía. Esa mujer sumisa que hacía todo lo que el marido le ordenara. Esa mujer sin carrera, sin sueños, sin aspiraciones. Nunca lo vi desde el lado de la persona que es abusada. Lo que uno hace por amor; por amor a los hijos, para que estén bien y felices. Eso era lo que yo pensaba al aguantar tanto. Y es ahora que me doy cuenta que estaba tan equivocada. A veces me odio a mí misma al recordar todo lo que pasaron mis hijos. Me odio al pensar que dejé a mi bebé, que estuvo dentro de mí nueve meses, a quien cuidé como un tesoro, de quién no me despegué ni un segundo durante su primer año, por un remedo de hombre que no valió ni la mugre que tiene entre las uñas. Me odio al ver a mi hijo menor con arrebatos de ira y rabietas porque, es lo único que ve de su padre desde que nació.
Pero más que nada me odio por haberme dejado humillar de esa manera. Porque dejé de ser yo. Recuerdo que mis amigas me preguntaban cómo era posible que yo, teniendo el carácter que había tenido siempre, me haya dejado mangonear de la manera en que lo hice. Nunca podré perdonarme el daño que les hice a mis pequeños y, lamentablemente, todo lo estoy pagando de una manera u otra.
Nunca voy a poder borrar estos recuerdos de mi mente. Nunca podré cambiar mi pasado. Pero puedo, tal vez, impedir que les pase lo mismo a otras. Puedo tratar de abrirle los ojos a esta sociedad machista y troglodita. Démonos cuenta que nosotras las mujeres, somos el regalo más valioso que pudo darles, la vida, a los hombres. No nos dejemos basurear por nadie. Ninguno tiene el derecho de hacernos sentir menos de lo que somos. Depende de nosotras crear una nueva sociedad donde nuestros hijos puedan vivir sin violencia. Cualquier tipo de conducta que no nos alimente para ser mejores seres humanos, contribuye al maltrato. Desde una mirada hasta un golpe, un insulto, una grosería. No debemos ser menospreciadas por nadie porque, NADIE está por encima de nosotras. No cometan el mismo error que yo, de pensar que los hijos están mejor con la familia unida porque, los niños merecen un hogar sano y feliz para vivir, no un campo de batalla. Por experiencia les puedo asegurar que, el arrepentimiento más grande que una madre puede sentir, es haberle hecho daño a sus hijos de manera directa o indirecta.
Y hombres, recuerden que, en algún momento pueden tener hijas; recuerden a sus madres y hermanas, no creo que quisieran que alguien las trate de esta manera. Tratar mal a una mujer no los hace más machos al contrario, los hace tremendos maricones.
Piénsenlo…

miércoles, 24 de noviembre de 2010

Prueba superada... o, ¿no?

Luego de escribir el anterior post, inmediatamente mandé el link a la persona en cuestión. Hubo tanto entre nosotros y a la vez tan poco, que pensaba haber superado, esa bizarra relación, hacia un tiempo ya. Imaginen mi sorpresa al darme cuenta que no fue así. En una conversación posterior a la lectura del post, este hombre que tanto quise (o quiero), me volvió a estremecer el corazón con unas pocas líneas.
Hace mucho tiempo que no hablabamos pero, la última conversación que tuvimos, en una noche de desvelo, definió completamente el rumbo de nuestra “relación”. O, eso creí yo. Realmente me alegró haber tenido esa charla con él. Entre tantas cosas que me dijo recuerdo algo que me llamó mucho la atención. Después de preguntarme por qué lo amaba tanto, me dijo: “Yo soy un mujeriego, bebedor, adicto al sexo, hermitaño, infiel... Y porque te amo es que no quiero arrastrarte a mi vida miserable. No quiero que sufras como lo hago yo...” Le dije: “Todo lo que me acabas de decir, ya lo sabía, y aún así te amo. Pero entiendo en qué momento de tu vida te encuentras y tampoco te pediría que me incluyas en ella...” En ese instante cerré ese capítulo de mi vida pensando en lo maravilloso que era este hombre aún teniendo todos estos defectos. Y me dije a mí misma: ”Ahora sí podré continuar”. Luego de eso nos vimos una vez más y, en mi cabeza, ya todo había cambiado. No sé si fue por tantos problemas que tenía yo en ese momento, o que él estaba enfermo pero, al final, no pude disfrutar completamente de esa tarde en su compañia. Aunque sí, admito, que me alegró muchísimo verlo luego de tanto tiempo.
Estos últimos meses he conocido personas muy interesantes, con las que podría fácilmente mantener una relación amorosa “sana”, por decirlo de alguna manera, si es que no estuviera tan feliz estando sola. Pero de entre todos estos individuos, hubo uno que me llamó la atención más que los otros. Coincidentemente comparte muchas cualidades de las que me vuelven loca de “el gran amor de mi vida”. Me parece muy lindo, no lo niego, pero haría falta bastante para que yo llegue a tomarlo como algo más.
Prosigo. Hoy hablé con mi seudo “hombre perfecto”. Y entre algunas cosas le conté esta cierta atracción/interés que he sentido por esta otra persona. Y la reacción fue totalmente inesperada. No sé de verdad a qué se debió su actitud un poco fría, cortante. Pero sí me pidió que si llegaba a tener algo con esta otra persona se lo dijera, porque eso significaba que entre él y yo no habría nada nunca más.
Se me hace un poco difícil describir cómo me sentí en ese momento. Al principio experimenté un poco de rabia porque me estaba, de cierta manera, amenazando (realmente no es tan dramática la situación como suena con esa palabra pero, no encontré otra :S). Pero a la vez me sentí confundida. ¿Qué me importaba a mí lo que pensara esta persona que, si bien es cierto, había sido muy importante, pero que ya no formaba parte de mi vida?, ¿Por qué me hizo sentir mal el hecho de saber que, tal vez, no habría de estar con él nunca más?. No puedo negar que, cada momento con él fue verdaderamente especial pero, pensé haber superado ese dolor que sentía por no poder estar con él. Y, quizás, he obviado un detalle importante en la historia. Cuando comenzamos a escribirnos y a construir esa seudo relación, él estuvo dispuesto a estar conmigo frente a todos, sin importar las circunstancias en que yo me encontraba pero, yo lo rechacé. Luego simplemente las cosas no se dieron a nuestro favor. Cuando yo por fin me di cuenta de que él era el hombre de mi vida, ya era muy tarde.
Pasó mucho tiempo para que yo, finalmente me deshiciera de la esperanza de que, en algún momento podamos volver a estar juntos. Y mientras tanto me refugiaba en los versos de Pablo Milanés: “La prefiero compartida antes que vaciar mi vida; no es perfecta mas, se acerca, a lo que yo simplemente soñé...” Ahora, después de tanto que ha pasado, es que me doy cuenta que la prueba más difícil, hasta ahora, está por venir. Es verdad, enterré mi sueño de ser feliz con alguien que, no solo adoro, sino que admiro, aún con sus tantos defectos, y decidí seguir. Pero aquí va la parte engañosa porque, ahora, me toca elegir dejarlo atrás completamente y renunciar también al hecho de que, a pesar de todo, siempre estaba en la parte de atrás de mi mente. Como un sueño olvidado que, todavía no pierde la posibilidad de despertar. Si decido seguir, él dejará de ser el gran hombre de mi vida. Mientras estoy sola, lo sigue siendo pero, en el momento de que llegue alguien más, tendré que revocarlo de su título.
Muchos pueden haber pasado por esto. ¿Cómo olvidar tanto?¿Cómo renunciar a la idea de estar con alguien? La verdad no sé cómo hacerlo. Estoy más que convencida que, un clavo no saca otro clavo. Sé que como él, no hay dos, y ése es mi karma. Acepté que nunca será solo mío pero, no me preparé para cuando no sea mío nunca más.
Con cabello largo, una sonrisa hermosa y una risa contagiosa me bastaba. Y aunque, en este preciso momento no es algo que impere, llegará el día en que, su voz y sus manos por ratos, no basten para hacerme feliz. En ese momento sabré efectivamente si la prueba ha sido superada, o no.

lunes, 22 de noviembre de 2010

MALA...

Todos tenemos un amor (o amores) que nos ha dejado marcados de una u otra forma. Hoy, leyendo un blog, recordé a cada uno de mis ex novios, vaciles, etc., y me di cuenta de una cosa. Después de todo lo que he pasado, porque, aun siendo tan joven he pasado por mucho, le debo gran parte de mi felicidad a un sólo amor, un solo hombre. Este post se refiere, obviamente a personas que no tienen ningún tipo de relación consanguínea conmigo, antes de que piensen que soy una mala persona por no deberle mi felicidad a mi familia.
En este momento de mi vida he logrado un balance emocional casi perfecto aunque, sé que todavía me falta bastante por crecer en ese aspecto. Hubo alguien que me devolvió mi vida. Éste, es un hombre más que inteligente, al único que he considerado realmente un desafío y motivación para crecer como madre, como mujer, como ser humano en general. Éste hombre, que me devolvió completamente mi autoestima, se volvió el único amor de mi vida. Con su pensamiento izquierdista, socialista, bohemio, revolucionario, removió en mi, sentimientos e ideas que tenía sepultadas, reprimidas muy dentro. Cosas que pensé en la adolescencia y que, según los prejuicios sociales, debía enterrar para poder madurar. Este ser completamente fiel a sus creencias, me enseñó muchas cosas. Me enseñó desde política, hasta lo que realmente significan las palabras libertad, amor y comprensión. Puede sonar muy cursi, lo que es un poco raro en mí, pero esta persona verdaderamente significó mucho.
Lo que más admiro de él, es el compromiso que tiene con la vida. Cómo puede despreciar completamente elementos que, para muchos se han vuelto necesarios, y para él simplemente son irrelevantes y superfluos. Vive una vida simple, haciendo lo que le gusta, sin aparentar por nadie y fiel a su pensamiento, para muchos “terrorista”. Lamentablemente lo nuestro nunca pudo llegar al grado de ser una relación por muchos elementos externos pero, nunca reproché o lamenté nada de lo que pasó entre nosotros. Le agradezco mucho. Él me dio valor para afrontar muchos problemas que tenía en ese entonces. Él me devolvió la ilusión de amar y de confiar en alguien. Me apoyó en cada uno de mis pasos y se preocupó siempre de que estuviera bien. Me brindó alegrías gigantes con las cosas más simples. Y a diario supo cómo sacarme una sonrisa, sin importar lo mal que me sentía en mi casa. Frases como: “¿si me fuera a la selva como guerrillero irías conmigo?”, me iluminaron y me dieron valor para deshacerme de todo lo malo que estaba destruyendo mi vida poco a poco.
Él fue la mayor influencia para que yo sea como soy ahora. Una mujer independiente, fuerte, segura de sí misma, consciente de sus defectos, y más que nada de sus virtudes. Muchos pueden confundir mi confianza con arrogancia; o tal vez mi independencia con la idea de que no necesito de un hombre. Varios me han dicho que soy MALA. No creo que ninguno de mis actos sean impulsados por maldad. Este gran amor de mi vida, me enseñó lo valiosa que soy y que me merezco más de lo que muchos me ofrecen. A veces he tratado de conocer a alguien pero, al ver que muchos tienen intenciones románticas conmigo, simplemente me alejo. Es lo contrario de ser mala. No me gusta herir a nadie, por eso cuando veo que, de una u otra forma, la relación con alguien puede tornarse, de alguna manera, incomoda, solo desaparezco.
No creo ser mala porque no quiero nada con nadie. Lo he mencionado en varios posts anteriores. No es que no quiera volver a enamorarme, el problema es que no encuentro a nadie que valga la pena el esfuerzo. Por lo menos, nadie que me corresponda. Y mientras voy conociendo a nuevas personas, personas viejas en mi vida, personas que conozco de años, o personas con las que nunca me imaginé hablando, sencillamente no me entrego por completo. No es por creerme la gran cosa pero, sé que soy capaz de ser muy querible y tengo cualidades muy específicas a las que los hombres se sienten atraídos pero, mi carácter es así naturalmente. El hecho de que me porte bien con todo el mundo no quiere decir que quiera algún tipo de relación amorosa con cualquiera que hablo de vez en cuando. Soy muy abierta para hablar de mi vida y de muchos temas más, y esto no significa que confíe en alguien como para tener algo. Soy muy sociable y muchos confunden eso como un interés de más allá de amistad.
Esa persona que me regaló tanto, a la cual adoro más de lo que adoré a cualquier otro, me educó, de cierta forma, dándome a conocer las miles de virtudes que tenía en mí y a la vez, me señaló defectos y me abrió los ojos a la solución para ellos. A él le agradezco infinitamente mi libertad, no solo física, sino emocional también. Y, bueno, si muchos piensan que es malo pensar en mí y en mi bienestar, pues le agradezco también por haberme hecho MALA.


Para el GRAN AMOR DE MI VIDA: “Desnudémonos pues como viejos amantes, que lo mismo de siempre nos queda adelante…” Silvio Rodríguez, Aunque no esté de moda… Con esto ya sabes quién eres…

¡FELIZ DÍA DE LA MÚSICA!


Hoy me levanté y me enteré de que era el día de la música. No sé, realmente a quién o qué, agradecer porque la música ha sido parte muy importante en mi vida. Estudié siete años piano, historia de la música y apreciación musical, y realmente puedo decir que, sin música, mi vida no tendría sentido. Muchos nos hemos visto influenciados, de manera positiva y negativa, por canciones, compositores y cantantes diferentes. Por eso, no me queda más que decir: ¡FELIZ DÍA!
Feliz día de la música...
A todos aquellos, que como yo, se han matado estudiando para alcanzar un sueño, que muchos consideran una pérdida de tiempo. A todos los que han aprendido a tocar algún instrumento por su cuenta, viendo videos de youtube o sacando las canciones de oído. A esos que se pasean por las playas tocando por unas monedas. A todos esos que cantan en la ducha y en los karaokes cuando están borrachos. A los que duermen escuchando música, se levantan con la radio encendida y salen a trabajar con su ipod en el bolsillo. A todos esos músicos que, no comprometen su visión y estilo solo por vender discos. A todos aquellos que viven y respiran música. Y finalmente, a todos aquellos a los cuales, alguna canción los ha hecho cantar, bailar, desestresarse, deprimirse, llorar, reír, amar...
Realmente no imagino a alguien que diga que no le gusta la música. Ese ser me daría mucha pena verdaderamente.

¿CULTURA DE SERVICIO?

Estuve esperando todo el mes para que estrenaran la película de Harry Potter 7. Nunca voy al estreno porque, realmente no me gustan las multitudes, y espero al tercer o cuarto día para ir al cine. Hay películas que, definitivamente, deben ser vistas en el cine. Como ésta causa furor a nivel mundial era de esperarse que encontremos bastante gente, aún siendo el tercer día luego de su estreno. Así que, mi mamá y yo, compramos las entradas para la función de las 8:00pm, aproximadamente a las once de la mañana en el cc. Sanmarino, para nosotras y una amiga más. Vivo en la vía a Samborondón pero, la amiga de mi mamá vive en la Kennedy, he ahí el por qué de comprar entradas en Sanmarino. Cabe recalcar que nunca voy a Sanmarino, Mall del Sol/Sur, los fines de semana, a menos que tenga un motivo específico. No me gusta “vitrinear”, ni ir de compras en estos centros comerciales. Y pronto entenderán por qué.
Así que ya estaba todo listo, aparentemente. La amiga de mi mamá fue una hora antes de la función para hacer fila, recomendada por la señorita que nos vendió en la taquilla. Cuando nosotras llegamos, media hora antes de la película, obviamente la fila llegaba casi hasta los ascensores. Nos dejaron entrar a la sala exactamente a las 8:00PM en punto. Lo que no nos dejó tiempo para comprar las típicas chucherías del cine. Como tenía que ir al baño, me sacrifiqué para ir a comprar, aprovechando que todavía no comenzaban a pasar ni siquiera los créditos. Cuando salí del baño, las colas para comprar la comida estaban repletas. Entré a la sala y decidí que cuando comenzara la película saldría de nuevo, esperando que para ese entonces estuviera vacío el bar y así pudiera comprar más rápido. Yo, como siempre, ilusa me olvido que estoy en Ecuador y no en algún otro país del primer mundo, dónde la gente usa la lógica en cada aspecto de su vida.
Comenzaron los trailers. Esperé unos cinco minutos y volví a salir. Y ahí comenzó mi tortura. Las colas para comprar seguían repletas. Como ya estaba afuera no me quedó más que hacer la fila. Cada una de las cajas tenía alrededor de seis personas esperando comprar. Me puse en la que, pensé que era la más corta, cuando una supervisora se me acerca y me dice que mejor me cambie a la caja número 2 donde había menos personas. Me cambié y esperé pacientemente mi turno. Cada vez me desesperaba más al ver al cajero que servía la cola y el canguil de la manera más despreocupada del mundo, como que si estuviera en cámara lenta. Me guardé cualquier comentario porque ya faltaban dos personas para llegar, al fin, a la caja. Luego de tanta espera, y habiendo pasado ya los diez primeros minutos de la película, llegué finalmente a la caja, y mi amigo, el señor cajero “tortuga acostada sobre su caparazón”, mundialmente decide IRSE de la caja sin decirme ni una sola palabra. Ni siquiera fue capaz de decirme: Srta. Disculpe un segundo tengo que ir a ver... ¡NADA! Entenderán lo frustrada que me sentía. Llamé a la “supervisora” que me había recomendado cambiarme de fila y ella, haciendo como que investigaba la situación, entró detrás del mostrador y, ¡oh sorpresa! se dio cuenta que era verdad lo que yo decía y el chico se había LARGADO dejando la caja desatendida. Lo único que me dijo la “supervisora” fue: puede que el cajero haya ido a ver algo, esperelo no más que ya ha de regresar. ¬¬ ¡¡¡En vez de cobrarme ella!!! En ese momento comencé a sentir la vena en mi frente y mi ojo izquierdo latiendo.
Esperé, alrededor de tres minutos más, a ver si aparecía el cajero. Al ver que no había señales de él, le pregunto a la otra cajera si no había otro supervisor, superior a la señorita “supervisora” en rango. Y la cajera, viéndome ya fúrica, tratando de salvar a su amiga de una repelada, me dijo que no había, que ella era la única supervisora. Más que el hecho de que me hayan hecho esperar, lo que más odio es que traten de verme la cara de imbécil. Y como no soy ninguna ignorante caída de la mata, me dediqué a localizar al supervisor del local que siempre está por ahí. Cuando lo encontré (el cajero todavía no había llegado a la caja) le comuniqué la situación, obviamente ya mi tono de voz había subido razonablemente, como era de esperarse. Justo en ese momento llegó el cajero y, como yo estaba reclamándole al supervisor, una chica se puso primera en la fila. Al final de mi acalorada explicación de los hechos, el supervisor del local, lo único que me dijo fue: “Lo siento realmente, el cajero fue a buscar más bandejas”. Esperando que yo haga la fila nuevamente para comprar. En ese momento con toda la rabia del mundo lo único que pude hacer fue regresar a la sala a ver la película porque, si llegaba a quedarme más tiempo contemplando la ineptitud del servicio, probablemente la discusión se hubiera vuelto desagradable.
Realmente me indigna el nivel de servicio que manejan las empresas ecuatorianas. No entiendo por qué, después la gente, denomina a las personas que prefieren los riocentros, como “peluconas” o “aniñadas”. En riocentro prácticamente, tanto supervisores como empleados normales, te cargan hasta la sala y te tratan de la mejor manera, y no solo en las salas VIP, sino en todas las salas. Entonces me pregunto, ¿acaso los usuarios de supercines sanmarino no se merecen la misma calidad de trato que los que van a riocentro?. ¿Cómo puede ser posible que traten de esa manera a sus clientes? Que pena que no se den cuenta que, al final del día, los clientes son los que pagan sus sueldos. Son la razón de sus utilidades y bonificaciones. Nosotros como clientes, que pagamos entrada y comida, somo quienes les damos de comer. Puede sonar horrible pero, es la verdad. Puede parecer poco, pero conmigo, perdieron 20$ y perderán mucho más porque no vuelvo a sanmarino a menos que sea estrictamente necesario. Lo que significa una pérdida para los empleados ya que, por lo que tengo entendido, la mayoría de empresas que brindan algún tipo de servicio al cliente, se orientan en las mediciones de calidad de servicio y ganancias por ventas, para otorgar comiciones, premios e incentivos.
Seguimos sin tener realmente una cultura de servicio. Es una lástima que, cuando escribí lo que me había pasado en el twitter, alguien me dijo: “A mi me parece que en el sanmarino tienen un buen servicio, no es el mejor, pero es bueno”. Me caí como condorito. Nosotros como usuarios debemos exigir el mejor de los servicios. Sino ¿por qué pagar por un servicio mediocre? Nosotros estamos malacostumbrados a conformarnos con lo que nos dan. Me parece ilógico que en supercines riocentro tengan una excelente atención, mientras que en sanmarino sea tan pobre, siendo de la misma franquicia, la misma empresa, las mismas ganancias. Cada uno de nosotros se merece el mejor de los tratos, sea cual sea su nivel social, por algo estamos pagando. Debemos incentivar una verdadera cultura de servicio sino, con toda esta mediocridad, discriminación, o cómo le quieran llamar, seguiremos siendo un país miserablemente tercermundista. ¡REACCIONA ECUADOR!

jueves, 18 de noviembre de 2010

TODOS SOMOS BIPOLARES

Toda mi vida adolescente y adulta he luchado contra un sinnúmero de cambios de ánimo que, realmente han afectado tremendamente mi desempeño académico, laboral y sentimental. Estar triste sin saber por qué; sentirme inmensamente creativa algunos días; momentos de paranoia controlada; eran actitudes parte de mi personalidad que, siempre adjudiqué a los cambios de la adolescencia.
Hace algunos años, estos “cambios de ánimo” comenzaron a perturbar de manera más directa el curso de mi vida. Cada vez se me hizo más difícil tomar decisiones acertadas y los episodios de depresión se hacían más frecuentes. Fue ahí cuando comencé a asistir al psiquiatra. Y luego de una evaluación excesivamente exhaustiva, me diagnosticaron un trastrono bipolar o psicosis maníaco-depresiva. De cierta forma, fue un alivio conocer la causa de todas las trabas que habían aparecido a lo largo de mi vida y, que con la medicación correcta, problablemente lograría aplacar esta condición de alguna manera; pero, nuevos tormentos comenzaron a raíz de esto.
Hay varios tipos de bipolaridad pero, generalmente se caracteriza por la presencia de episodios depresivos mayores o leves, alternados por estados de manía o euforia exagerada. Las personas que padecen de este trastorno viven cuando están con crisis en los dos extremos opuestos de la vida; cuando están deprimidas, pierden el interés en la vida, llegando a pensar en la muerte y en el suicidio para dejar de sufrir. De igual modo, cuando están contentos, se llenan de euforia y ven todo de color rosa, se sienten capaces de hacer cualquier cosa, y llegan al extremo de no dormir por considerar que es una actividad innecesaria dentro de su nueva faceta de "inacabable movilidad". En algunos casos la euforia es tal que pueden llegar a cometer acciones que en un estado de conciencia normal no harían, como consumir drogas o gastar dinero hasta la ruina económica propia y familiar.
Uno de los aspectos más interesantes y que suele ser mal entendido por la gente es que el trastorno bipolar, por lo general, incrementa la energía creativa de la persona. El trastorno bipolar se encuentra en una cantidad desproporcionada de personas con talento creativo, tales como artistas, músicos, escritores, poetas y científicos, y algunos acreditan a su condición de bipolar el tener tal creatividad. Muchas famosas figuras históricas que tiene el don de la creatividad, comúnmente se cree que han sido afectadas por el trastorno bipolar, y fueron «diagnosticadas» póstumamente basándose en cartas, escritos, hechos contemporáneos o en otros materiales. Mientras que el desorden comúnmente incrementa la energía creativa, el síntoma de depresión, prontamente hace que la persona se ponga rabiosa y frustrada. Es un ciclo con el que muchas personas famosas han tenido que vivir durante toda su vida. Gran cantidad de artistas padecen o han padecido este trastorno.
Ahora, luego de dos años de tratamiento, he comprendido la razón de cada uno de mis estados de ánimo. He podido analizar y entender realmente cada una de las decisiones que afectaron de alguna u otra manera el curso de mi vida. Y, aunque vivo atormentada porque sé que, de ahora en adelante, estaré destinada a medicarme el resto de mi vida, puedo decir que he llegado a controlar parcialmente este síndrome trantando de que no influya mayormente en mi rutina.
Pero, recientemente me he percatado de algo que me parece no sólo curioso, sino ilógico y un poco insultante. Al parecer se ha “puesto de moda” ser bipolar. En perfiles de twitter, facebook, estados en messenger, etc., se puede encontrar frecuentemente una línea que diga: soy bipolar. Yo, que soy bipolar, no lo escribo en ninguno de mis perfiles. No entiendo qué tendría en la cabeza una persona que decide, de cierta manera, hacer burla de éste, que es un síndrome completamente desesperante para el que lo padece. Tal vez confunden este desorden con el cambio de estado de ánimo común. Cuando estás triste, feliz, molesto, pero existe una razón para el cambio. Quizá tratan de justificar de alguna manera ciertas inseguridades que se producen por otros problemas psicológicos, o la simple inmadurez que presentan ciertos individuos. O simplemente, algunos creen que, decir soy bipolar, los hará más interesantes.
De una u otra manera, sean cuales sean sus razones, me parece enormemente ofensivo. Es como que comenzaran a decir soy ADHD o tengo síndrome de down, para justificar algún tipo de deficiencia en el aprendizaje. En otras palabras, que digan que son ADHDH, cuando la verdad es que son brutos o son vagos. O que digan quiero ser anoréxica para poder bajar de peso más rápido. Me parece una muestra de ignorancia extrema y una falta de respeto terrible, sin contar que, es la más clara demostración de inmadurez pensar que escribir este tipo de cosas los va a hacer más interesantes. Deberían estar agradecidos de que NO son bipolares, que no tienen que preocuparse de tomar todos los días la medicación a la misma hora exacta; que no tienen que sufrir consecuencias de decisiones mal tomadas; que no tienen que analizar meticulosamente cada paso que dan, cada palabra que dicen o cada pensamiento que tienen, porque no estan seguros de si, en ese momento, están lúcidos o son víctimas de los desbalances químicos; o que no deben martirizarse pidiendo a Dios, o a cualquier ente superior en el que crean, que ninguno de sus hijos herede este trastorno.
Parece que el ser desubicado, ignorante y ridículo, se está poniendo cada vez más de moda. A ver si con esto aprenden algo y se dan cuenta lo LINDO que es ser bipolar... ¬¬

COSAS QUE ODIO ¬¬

Odio...
- La gente que no te conoce y te dice AMIGA. Me dan ganas de responder: ¿Nos conocemos de algún lado? Porque, si no es así, yo no soy su amiga PLGP! ¬¬ Aunque confieso que, cuando trabajaba, le decía así a los clientes (hombres) cuando hacía algo mal y ponía cara de bambi. A una mujer bonita se le perdona todo con esa cara. O, por lo menos a mi, siempre me funcionó.
-Las preguntas idiotas como: si te ven llorando, ¿estás llorando? cual chavo del 8... NO! me estoy lavando los ojos de adentro para afuera... Si llegas a algún lado, ¿ya llegaron?... Me robaron, ¿quién?... ¬¬ Esas por el estilo.
-Cuando estoy deprimida y mi playlist sólo me saca canciones cortavenas x_x
-Cuando me termino de bañar y me doy cuenta q no he traido toallas y no hay en el baño. O cuando voy al baño con las últimas y me doy cuenta que no hay papel higiénico y tengo que correr a otro baño.
-Cuando estoy descargando algo. Y cuando está a punto de terminar la descarga, se va la señal de internet.
-La gente que no diferencia las palabras a la hora de escribir: Ay, hay, ahí, a ver, haber, etc. De hecho odio la gente que no sabe escribir en general. Me doy contra la pared cuando me escribo con alguien así.
-Cuando, luego de terminarme un vaso de agua, me doy cuenta que usé un vaso sucio para servirme. Peor cuando me doy cuenta que lo usaron antes para servir leche. Me da un asco indescriptible.
-La gente que da demostraciones exageradas de afecto en público. Acepto que se quieran y que se abracen o se besen en lugares públicos pero, es muy diferente cuando parece que se están comiendo el uno al otro y que en cualquier momento comienzan a censurar la escena con barritas negras en los genitales.
-Las muejeres que parece que se les ha perdido la fiesta. Esas, que para ir a la universidad o al supermercado, sacan la cachina. Que se ponen zapatos de taco aguja, vestido ceñido y todo el catálogo de YANBAL en la cara.
-La gente que cree que vistiendo o usando cosas de buena marca se ve bien siempre.
-La gente que para aparentar fuma o bebe y luego termina haciendo el ridículo. Aunque eso también es divertido a veces. :D
-La gente impuntual, aunque puedo ser muy comprensiva si la situación lo amerita.
-Que me presionen para hacer cosas que no quiero hacer.
-La gente que se complica por todo. De esas que hacen una tormenta en un vaso de agua cuando tienen la solución a sus problemas en sus propias narices. Se quejan por el tráfico; se quejan por el calor, por el frío, por la lluvia, por el viento que los despeina y por todos los elementos climáticos; se quejan por ellos y por otros. Así es la vida, no podemos tener lo que queremos siempre y hay que aprender a disfrutar cada instante de la misma.
-La gente que cree que el dinero es la solución a todos sus problemas. Esas personas que quieren que les caiga una maleta con plata a los pies mientras caminan por la calle. Lo que me lleva también a odiar a las personas que creen que porque tienen dinero son la crema y nata de la sociedad. NEWSFLASH! Así tengas todo el dinero de Bill Gates, eso no te va a hacer mejor persona. Las personas que realmente valen la pena, son aquellas que a pesar de tener o no, recursos económicos, se preocupan por nutrirse a sí mismas como seres humanos. Las personas generosas, humildes, cultas y tolerantes.

Se que muchos han de coincidir conmigo en las cosas que odio. Todos tenemos elementos que nos irritan de manera especial, más que otros. La diferencia conmigo es que no dejo que nada me amargue. La paciencia es una de las cualidades del ser humano más importantes. No lo olviden.

domingo, 14 de noviembre de 2010

THE ROCKY HORROR PICTURE SHOW

Realmente no soy de admirar costumbres norteamericanas. Pero, hay un elemento culturar muy escondido en la historia de los Estados Unidos, que me llama mucho la atención. Muchas veces he dicho que, definitivamente, con mi personalidad y carácter, hubiera encajado perfectamente en los años 70´s. Y este post se trata de algo incrustado en la mitad de esa década y que se sigue celebrando hasta ahora, cada año.
“The Rocky Horror picture show” es una película sobre el musical de Richard O’Brien, que lleva el mismo nombre. Dirigida por Jim Sharman en 1975. Ésta película, para mi fascinante, trata de satirizar los filmes de ciencia ficción de la época, incluyendo temas casi “escandalosos” como el travestismo, el sexo, la infidelidad, la promiscuidad, extraterrestres y los experimentos científicos morbosos. Por esta película se funda un movimiento en los Estados Unidos, “The Unconventionalists”, que, luego se extiende a muchos otros países, somo España y Argentina.  Este grupo social marginado conjuga a lo que la sociedad retrógrada rechaza como miembro de la misma; perteneciendo a éste los homosexuales, travestis, entusiastas de los tatuajes, artistas alternativos, etc. Obviamente ahora, vivimos en un mundo más “abierto” a todas estas representaciones artísticas de la personalidad humana y vemos como normal ver a una persona con tatuajes o a un travesti pasar por la calle (aunque también existe todavía intolerancia).
Y he ahí lo que me llamó tanto la atención. Cada año se vuelve a pasar la película en cines específicos para eso. Se hace de la proyección una fiesta donde interactúan actores y el público asistente. Hay elementos de utilería para partes específicas del filme, que son entregados al principio de la función a los asistentes. Y, como es de esperarse, cada año los aistentes son estos “freaks” de la sociedad, quienes por un momento se sienten aceptados y reconfortados al saber que hay más gente “como ellos”. Espero en algún momento tener la suerte de asistir a una de estos double feature picture shows, porque realmente me considero un elemento raro de la sociedad reprimido por muchos años. Me parece algo icónico de la década de los 70’s, saliendo de la revolución sexual de los 60’s y empezando una nueva era de inclusión social, abordar temas, de cierta forma, polémicos, y hacerlos parecer tan normales.
La trama es muy simple. Janet (Susan Sarandon, en sus años mozos) y Brad (Barry Bostwick) son dos jóvenes muy tradicionales que se comprometen para casarse y deciden emprender un viaje para visitar al Dr. Scott, quien fue quien los presentó. En el camino, su auto se descompone, lo que los hace verse obligados a entrar en un castillo, un poco sospechoso, para pedir ayuda. En medio de la lluvia, se dirigen al castillo, para encontrarse con muchos personajes muy peculiares. Riff Raff y Magenta, criados de la casa, los llevan adentro, donde se encuentran con una convención de transilvanos que han venido para presenciar el nuevo experimento del Dr. Frank-N-Furter, un científico loco travesti: un hombre perfecto que satisfaga sus necesidades. Entre muchas situaciones sexuales confusas y miedo, Brad y Janet logran escapar del castillo pero, el Dr. Frank-N-Furter no corre la misma suerte al ser asesinado por sus criados que, al final, han revelado su verdadera identidad extraterreste.
Realmente es una de mis películas favoritas. Tiene elementos humorísticos muy novedosos para esa época. Claro, que no se compara con las películas de ahora con efectos especiales de última generación pero, es muy entretenida y las canciones son muy pegajosas. Espero que se animen alguna vez a verla.


sábado, 13 de noviembre de 2010

EL QUE SE ENAMORA PIERDE


Gracias a un amigo twittero leí la frase que sirve de título de esta entrada; y realmente me vinieron mil ideas a la cabeza. Innegablemente, en estos tiempos, tiene razón. Formamos parte de una cultura totalmente "quemimportista" en asunto de relaciones intepersonales, no sólo de pareja, sino en general. Luego de un debate, un poco controversial, dentro de éste mismo medio me di cuenta de algunas cosas.
Las relaciones han decaído lamentablemente a un nivel de prescindibles o desechables. No buscamos realmente alguien que nos llene y nos complemente, sino que solo nos haga compañía. Odiamos el hecho de vernos solos, lo que nos lleva a buscar un cuerpo que llene ese vacío; y como, obviamente, no queremos arriesgarnos a sentir algún tipo de malestar o dolor, simplemente no nos comprometemos del todo en nuestras relaciones. Nos preguntamos, luego, ¿por qué no encuentro alguien que valga la pena? Y no nos damos cuenta que somos nosotros mismos la raíz del problema. Si no buscamos realmente comprometernos, confiar, en alguien, ¿cómo esperamos encontrar reciprocidad en otra persona? Llegamos a un punto en que enamorarse es algo casi prohibido. Queremos relaciones pasajeras, que cubran una necesidad transitoria de compartir nuestras vidas.
Lo que me lleva a pensar que tal vez estemos un poco confundidos en los términos que empleamos para describir nuestros estados sentimentales. Muchas veces creemos estar enamorados pero, resulta ser simplemente una ilusión. Una ilusión es ese sentimiento que hace que “se te pare el corazón” cada vez que piensas, hablas o estas con ese alguien especial pero, que al cabo de un tiempo desaparece. Es esa fase donde todo te parece (falsamente) perfecto con esa persona. Si la relación persiste luego de esta fase, podríamos estar definiendo lo que viene como estar enamorado. No como enamoramiento. Enamoramiento y estar enamorado verdaderamente, son dos cosas muy distintas una de la otra. Una vez escuché una frase, realmente no recuerdo dónde, que decía algo como: “el amor verdadero no es lo que te hace pensar que tu pareja es perfecta, sino lo que te abre los ojos a sus imperfecciones y que, a pesar de ellas, te permite aceptarlo y quererlo.”
Ahora que definí brevemente estos términos, no puedo dejar de cuestionarme si lo que queremos realmente es enamorarnos, o simplemente, como dice mi madre, lo que nos gusta es la idea de estar enamorados. Queremos sentir esas maripositas en el estómago pero, como dije anteriormente, no queremos pasar de eso. Cuando la ilusión se acaba con uno, pasamos al otro para poder mantener ese estado de “enamoramiento”. Ese momento en donde todo es de color de rosas y seguimos sin entender que, como dije en mi entrada “Quiero enamorarme”, la fase siguiente, la que sí nos costará lágrimas de sangre, ésa es la que nos hará realmente felices. El truco está en encontrar a esa persona que valdrá la pena llorar, por la que valdrá la pena sufrir. Pero hasta mientras nos enfrentamos con una ideología de “a ver qué sale”, del vulgarmente llamado “qué chucha”; dejando en el camino muertos y heridos. No todos tenemos control completo sobre nuestras emociones, por lo que no debemos ser arbitrarios con los sentimientos de otros. Y, muchas veces, no nos damos cuenta que, toda esta ruleta de relaciones, en algún momento nos dejará cansado el corazón, por representar simbólicamente de alguna manera a nuestro centro emocional. Llegará un momento en que perderemos completamente la confianza y la capacidad de amar. Esperemos que, la persona adecuada, no llegue muy tarde.
¿El que se enamora pierde? Personalmente creo en lo contrario. Enamorarse es la culminación de un trabajo bien hecho. Y la satisfacción que viene de ésto es indescriptible. ¿Por qué alguien no querría enamorarse?

INTANGIBLE

Entre mis incontables dotes artísticas (modestia aparte), se destaca una de mis preferidas en esta entrada. Mi padre hizo teatro muchos años y, para mi linda suerte me heredó su amor por las artes escenicas. Aquí les comparto un corto que protagonicé el año pasado participando en el X Festival de Artes al Aire Libre (FAAL).

http://www.youtube.com/watch?v=A8cPS0Gs11Q

Les haré una corta sinópsis. El cortometraje puede parecer un poco confuso porque carece de una línea de tiempo definida. Raya un poco en lo bizarro ya que, no sabemos si las imágenes que apreciamos tienen lugar en el presente, pasado, futuro o quién sabe, en sueños o recuerdos.
Narra brevemente la historia de una pareja, mostrando la ironía clásica de las relaciones modernas: pasar de ser completos desconocidos a ser imprescindibles el uno para el otro y, luego, por cualquier giro del destino, volver al anonimato en sus realidades.
Un dato curioso del rodaje del corto es que no conocí a mi co-protagonista hasta el día que empezamos a filmar. Fuimos un grupo de personas muy divertido y se me hizo muy fácil trabajar con ellos. Hubieron algunas escenas que no se insertaron en la edición pero, al final fue todo un éxito.

Este corto fue dirigido y producido por Jonathan Arévalo y Andrés Elias. Espero que lo disfruten.

viernes, 12 de noviembre de 2010

Una vida recordando... (parte III)

En esos días, Antonieta, una de sus mejores amigas, le había presentado a su primo Mario. Habían salido. Realmente no era su tipo, pero tenía ésa única cualidad que ella buscaba en un chico, que la haga sentirse querida. Sin saberlo, ésa relación se iba a convertir en el catalizador que cambiaría el resto de su vida.
Al fin dejó su cama al escuchar salir a su hermano del baño. Rápidamente tomó una ducha y se vistió. Hasta para vestirse era única. Tenía un estilo muy particular pero, no dejaba a un lado su lado femenino. Su calentador roto dejaba ver las medias de colores, con una combinación muy divertida. La camiseta del uniforme de diario en vez de la educación física. Aretes de colores vivos. Muñecas adoranadas con incontables pulseras. Cabello suelto adornado con una cinta de color amarillo. No se maquillaba, a diferencia de muchas niñas en su colegio, porque realmente no sabía maquillarse. Cada vez que lo había hecho recibía un comentario hiriente de su madre, de cómo se veía como una zorra.
Su madre era una mujer peculiar. Muy bonita y preocupada por su aspecto. Como su esposo, trabajaba todo el día y también era profesora. A diferencia de él, ella tenía un estilo más bohemio en todos los aspectos de su vida. Había sido rockera en sus días de juventud y tenía un concepto de cómo vivir la vida, un poco más abierto que el de su marido. Se había casado muy jóven así que realmente no había vivido mucho pero, siempre ofreció a sus hijos una vista más mundana de la realidad que vivían. Tenía pensamientos más liberares.
Aunque nunca les faltó nada, a Verónica le tocó vivir algunos tiempos difíciles, a diferencia de su hermano Sebastián que, por ser el menor llegó en la época cuando sus padres ya se habían establecido bien económicamente. Verónica tuvo que ajustarse siempre a lo que sus padres pudieron darle, envidiando siempre la suerte de muchas otras niñas. Ésto, en cierta forma, le enseño a no ser superficial. Nunca fue interesada, ni codiciosa. De hecho ésta cualidad que, para muchos podría ser buena, en ella se había convertido en un defecto. En ella no existía ni una pizca de malicia, por lo que no sabía diferenciar entre el bien y el mal. Bajo sus ojos, todos tenían buenas intenciones. Sus padres, a pesar de sus limitaciones económicas, habían tratado siempre de darle lo mejor tratando de que no conociera el sufrimiento que acosaba a muchas familias en su ciudad; lo que hizo que creciera en una burbuja irreal y alejada del angustia de la pobreza...

Continuará...

Quiero enamorarme...

"Now I´m speechless, over the edge, I´m just breathless, I never thought that I´d catch this lovebug again..."

Si la vida fuera tan fácil y tan linda como se describe en las canciones pop, tal vez muchos no tendríamos tanto miedo a enamorarnos. Confieso que me he "enamorado" varias veces en mi vida. Mi madre, cada vez que digo que estoy enamorada, ya simplemente me deja hablar. Como me conoce, sabe que será solo una ilusión pasajera.
Estoy en una etapa de mi vida en que me he consagrado como una mujer guapa, inteligente, independiente y una excelente madre en potencia (me falta mucho por aprender todavía); lo que me ha hecho pensar muy bien acerca de la inclusión de una pareja a mi "rutina". No puedo negar que todos merecemos un poco de amor pero, lamentablemente, las circunstancias y situaciones, buenas o malas, acontecidas a lo largo de mi vida, me han dejado un poco de trust issues.
Obviamente por muchos conceptos, en mi opinión, errados de esta sociedad machista, se nos ha enseñado siempre que una mujer no puede dar una imagen de tener muchos amigos o muchos pretendientes, porque está mal visto. Este mismo concepto nos ha llevado a conocer poco y a enamorarnoss de personas erróneas. Creo que el problema radica en la fusión de culturas, de generaciones, de costumbres. No queremos que nos digan que somos unas cualquieras por tener muchos "seguidores", por eso nos "amarramos" con la persona a la que queremos conocer más. Luego de un tiempo nos damos cuenta que esa persona no comparte las mismas creencias, costumbres, intereses, que nosotros y pasamos al siguiente. Claramente todo esto genera un desgaste emocional bárvaro. Lo que nos lleva a decirnos a nosotros mismos que el amor duele.
El amor duele... ¡Claro que duele! Todo lo que nos da recompensas en esta vida, duele: tener un hijo, construir una familia, tener estabilidad laborar/económica, culminar estudios. El hecho de que nos haya costado tanto es lo que nos da la mayor satisfacción al final. El cultivar el amor de manera correcta cuesta. Cuesta sacrificio, lágrimas. Nunca me gustó la poesía, ni las canciones extremadamente románticas, porque hablan de un amor iluso, con flores, besos, sonrisas, y, aunque todos estos elementos son parte de una relación, no describen completamente los que es enamorarse. El amor es dolor, no sólo mental, sino también físico. Es esa ansiedad, dolor en el pecho, como que te hace falta aire; ese nudo en la garganta, que sientes cuando te descepcionan. El mismo nudo que sientes cuando crees que el corazón te late a más de mil por segundo. Ese sentimiento agri dulce que es enamorarte realmente te hace sentir vivo. Y aunque suena tan bien ese dulce sufrimiento, todavía no me atrevo a buscar a alguien que me lo cause.
No he perdido la fe en el amor, a pesar de todo lo que me ha pasado, pero, quiero asegurarme de que esa persona se merezca mi esfuerzo y sufrimiento. Gracias a Dios, he desarrollado un pequeño interruptor en mi interior, que me permite ilusionarme o no con alguien. Las veces que lo he hecho, innegablemente he sufrido, pero también he sido muy feliz. Por eso es que no pierdo la esperanza de que haya una persona perfecta para mi. Hasta que la encuentre simplemente mi interruptor esta en off. Estoy segura de que cuando lo encuentre el interruptor se activará automáticamente.
Quiero enamorarme. Solo que quiero estar segura de que es lo correcto.

jueves, 11 de noviembre de 2010

ANSIEDAD


Encierro existencial.
Sed de muerte, de castigo.
Sueños rotos,
personas desaparecidas...
Una vida de sacrificios truncada.
Un ser.
Un ser que derocha estupidez,
miseria...
Pensamientos:
Castigarlo,
Desgraciarlo,
Sed de sangre y sufrimiento.
Cigarrillos, dulce muerte,
y a la vez, dulce paz.
Todo por esa luz...
Quien me llena el corazón de besos.
Quien llena mis ojos de lágrimas.
Quien hace mi vida más fácil.
Todo por esa luz...
Que me convierte,
en madre,
amiga,
profesora,
cocinera...
Todo por esa luz que,
fácilmente
me convertiría en asesina.
Ansiedad no me dejas.
No me dejas vivir sin
esa luz...
Ansiedad quítame.
Quítame ese nudo
en la garganta.
Quítame ese humo
que me calma.
Quítame esa sed
de sangre.
Ansiedad déjame...
Déjame...

lunes, 8 de noviembre de 2010

Sexo SIN FRONTERAS

No tengo un pelo de cojuda, que me haga la cojuda es algo muy diferente...
Entraré de lleno al tema que quiero tratar. Sexo, hacer el amor, tener relaciones. Todos podemos concordar en que en estos tiempos las generaciones ven el sexo, cada vez más, como un acto común y corriente. Conseguimos hacer del sexo algo completamente sin valor.
No voy a ahondar en los términos románticos del sexo y en toda la cursilería que comprende el estereotipo de "hacer el amor" mas bien trataré este tema de una manera más objetiva. Está comprobado que la practica de la actividad sexual influye de manera considerable en la vida cotidiana; esto se debe a que tener una vida sexual activa y placentera aporta numerosos beneficios al organismo: fortalece el sistema inmunológico, previene problemas cardiacos y determinados cánceres, combate la depresión y el estrés, estimula la memoria, levanta la autoestima, adelgaza, rejuvenece y produce una sensación de bienestar generalizado.
Claro que ayuda muchísimo tener una pareja con quien practicarlo regularmente pero, ¿qué pasa si no la tienes?. No apoyo el libertinaje, acostémonos con quién se nos pase por en frente, NO! Recordemos que no estamos en los años 60´s, la liberación sexual ya no está de moda y hay más enfermedades venéreas que peces en el mar. Lo que sí apoyo siempre es que aprendamos a "darnos amor nosotros mismos".
Creo que la masturbación, a parte de ser una práctica sana, nos ayuda a conocernos a nivel fisiológico. Si tú mismo no descubres qué te gusta, cómo te gusta que te toquen, ¿cómo pretendes transmitirle a tu pareja tus deseos para tener una vida sexual saludable?. La masturbación, es usada además con motivos terapéuticos, como en los tratamientos para la eyaculación precoz y de la disfunción eréctil, en el hombre, además que hay estudios realizados los cuales afirman que ayuda a prevenir el cáncer de próstata. La masturbación femenina, es buena para tratar disfunciones sexuales femeninas tales como la anorgasmia y para aliviar los dolores menstruales y premenstruales.
Quienes hayan experimentado la masturbación, coincidirán en que ésta, ayuda a liberar el estrés, a satisfacerte física y emocionalmente, a conectarte con tu cuerpo y con tus fantasías sexuales.
Habiendo leído todo esto habrá personas que se sientan ofendidas con todo lo que dije. A ellas les digo: ¡CARAJO! ¿Acaso tú no eres humano? ¿no necesitas sexo? La falta de sexo no sólo genera alteraciones psicológicas sino que también afecta tu rendimiento general dentro de tu vida. Y claro que a veces sí hace falta ese calor humano y concuerdo en que no está mal pegarse "una canita al aire" de vez en cuando, muy de vez en cuando.
Personalmente, me gusta que me "cortejen". Si se ve buena química y se dan las cosas, tal vez un encuentro sexual, debidamente "estrategizado", puede ser un buen medio de liberar estrés. Si no hay química con esa persona, ¿por qué malgastar tiempo en sexo que lo único que hará es aumentar tu frustración sexual?. OJO, yo en este tema soy un poco más romanticona, porque realmente sin confianza no funciono bien en esta área, pero entiendo a las personas a las que se les hace un poco más difícil conservar una "pareja de baile". Y he aquí la razón de mi frase al inicio. El hecho de que crea en un concepto más romántico del sexo no quiere decir que sea una tonta. Me gusta relacionar el sexo con la química que hay entre dos personas mas, no me gusta tratarlo como un acontecimiento casual. Si la persona conmigo está de acuerdo bien, sino siempre habrá una manera de mantenerme "entretenida". Siempre he dicho que, si quiero, puedo ser una mujer sexualmente autosuficiente.


Con todo esto ya dicho sólo los puedo dejar con un consejo: aprendamos a conocer nuestro cuerpo, atrévanse a explorar sus gustos y a derribar tabúes. Luego de ésto, créanme, no existirán fronteras para ustedes.

Redes Sociales... La "stalkeada" YA ES DE TODOS!

Muchos de nosotros tenemos acceso a varias redes sociales. Seguimos a todo el mundo en Twitter, tenemos un perfil de Facebook y en el, ya difunto, Hi-5. Algunos buscan citas y gente de otros países en Badoo y en otras páginas similares. Todas éstas denominadas redes sociales nos permiten expresarnos de muchas maneras. Compratimos fotos, comentarios, estados, pensamientos, nuestra vida entera.
#yoconfieso que no salgo mucho, como se habrán dado cuenta por la frecuencia con que TUITEO y escribo, por lo que el internet es mi manera de relacionarme con el mundo a mi alrededor. Puede ser que muchos digan que no tengo vida. Pero, ¿por qué esta afirmación?, ¿acaso los que tienen face o escriben en twitter no es gente real?. Personalmente creo, que los que dicen ésto no saben realmente el poder que tienen las redes sociales. De hecho el Twitter me parece una herramienta de información única. Por ejemplo, el día 30 de septiembre de este año #30-S, con el famoso secuestro de Rafael Correa, la gente en twitter revisaba su TL y encontraba información que no tenían los medios hackeados por el gobierno. Y así es también una herramienta de marketing y muchas cosas más.
El problema radica en la información que comenzamos a compartir con el mundo. Todas éstas redes te permiten mantener identidades completamente confidenciales y que a su vez pueden ser ficticias. Como en la vida real, el internet se ha convertido en una realidad 2.0 llena de stalkers y depredadores sexuales, sin mencionar tambien a cualquier tipo de delincuentes cibernéticos. Aquí hay varios casos de personas víctimas por el mal uso de las redes sociales:


Las redes sociales permiten intercambio de información pero cada uno selecciona lo que quiere mostrar. Facebook y Twitter permiten proteger información personal. Siempre es mejor ser precavidos con lo que subimos a la red.

 TIPS PARA NO SER STALKEADOS
1.- No poner información personal, dirección, teléfonos.
2.- No subir fotos donde se vea tu lugar de residencia, trabajo, etc.
3.-Si quieres que todo el mundo te conozca pero no quieres que nadie sepa quién eres, es mejor usar un seudónimo.
4.- Nunca acceder a encontrarte con nadie sin ser acompañado por una persona que si conozcas y que pueda auxiliarte en caso de que algo malo pase.
5.- Nunca darle tus claves a NADIE! ni así tengas mucha confianza cn tu novio/a, hermano, mamá, papá, mejor amigo. NO LO HAGAS! ¬¬

#yoconfieso que he pecado con algunos de los tips que acabo de dar pero por suerte todo me ha salido bien hasta ahora, aunque tengo muchos bloqueados en facebook, msn y twitter.



Diccionario de términos usados:

Stalkeada, stalker, stalkeado: del verbo to stalk en inglés. Acosar, acosador, acosado.
Twitter y Facebook: redes sociales populares en internet.
#yoconfieso, #30-S: hashtags comunmente utilizados en twitter.
Tuiteo: escribir en twitter.
TL: time line, lugar donde se ve todo lo escrito en twitter.
2.0: mundo virtual
¬¬: mi mirada característica, significa: "¿eres o te haces?"
Msn: Windows Live Messenger

Una vida recordando... (parte II)

Verónica al fin se levantó al sonido de la ducha. Su hermano, Sebastián, se había levantado antes y le había ganado el turno en el baño. Mientras esperaba que se desocupara, siguió soñando. Imaginó su graduación, con ella de oradora de su clase. Aunque no era la mejor alumna de la promoción, era la mejor oradora. A ella las calificaciones no le importaban, y sus padres habían aprendido a aceptar ese hecho ya que, sus logros académicos eran incontables. Concursos de oratoria, de teatro, de conocimiento en general. Ella se destacaba en cualquier área que se propusiera.
Era una muchacha muy inteligente y talentosa. Había estudiado piano muchos años. Tenía habilidades manuales como ninguna otra persona que ella conociera. Era extrovertida, divertida y muy bonita. Larga cabellera castaña que le llegaba al término de su espalda, lacia. Tez blanca, llena de pecas. Delgada. Pero lo que más sobresalía en ella era su rostro. Nariz respingada perfectamente formada, labios carnosos y rojos, ojos almendrados cafés, pestañas largas y rizadas. Su mirada y su sonrisa podían iluminar cualquier habitación a su paso. Mirada pícara y tierna a la vez. Risa resonante y contagiosa. Su personalidad la había rodeado siempre de muchos amigos, enemigos y admiradores. Era una chica especial. Enamoradiza, pasional, de espíritu rebelde, indomable. Era la pesadilla de los profesores aunque todos la adoraban. Siempre de buen humor, ingeniosa y sarcástica.
Pero, aún con todas estas cualidades, ella se veía de otra forma. Sentía una clase de anorexia sentimental. Ella nunca se consideró bonita. Cuando los chicos comenzaron a fijarse en ella no supo explicarse por qué. Ella se veía a sí misma, sin gracia, común. Gracias a que sus padres casi nunca estaban en casa, ella se veía sumergida en depresiones que pensaba, se alejarían curandose la ansiedad con cigarrillos. La relación con su padre la llevó a buscar reafirmación de sus talentos en otras personas. Nunca estuvo sola, sin novio. Como los pretendientes no le faltaban, poco a poco se hizo adicta a estas relaciones que le alimentaban el ego. Al principio comenzaron siendo noviazgos casi de juego mas con el tiempo fueron agregandose elementos realmente noscivos para ella, involucraban sentimientos más serios, un desperdicio de tiempo significativo y la toma de decisiones que podrían afectar su vida para siempre. Invariablemente creyó que tenía amigas más bonitas que ella. Pero la verdad era, que de su grupo íntimo de compañeras, ella era la más atractiva y agradable...
Continuará...

¿Las mujeres son de Venus y los hombres de Marte?

Creo que todos, en algún momento hemos escuchado: "¿Quién entiende a los hombres/mujeres?". Esta, en mi opinión, es una excusa para ocultar descaradamente que no tenemos realmente la capacidad de comprometernos a lo que exigen las relaciones de pareja.
Yo me he dado cuenta que el comportamiento humano por géneros es fácil de descifrar. Los hombres lo que quieren es una mujer que, a nivel inconsciente, les recuerde a su madre o al modelo femenino que han abrazado en su niñez. Una digna "hembra" que encaje completamente en el prototipo de la mujer perfecta. Alguien que en su momento sea una "chola que se respeta" que los acompañe al estadio y que insulte con ellos; que se preste para ir a comer a la caraguay un buen encebollado luego de una buena farra; que chupe sentada en una chancleta en la tienda del barrio; pero que a la vez muestre su lado tierno, delicado y detallista, esa mujer que puedes presentar a tus padres sin miedo al qué dirán; que sea la envidia de tus panas, que se comporte como una princesa cuando deba hacerlo; y por sobre todo que sea una diosa en la cama y que no tenga tabúes sexuales. Obviamente es un "plus" que sea inteligente y que a parte de eso tenga un cuerpazo. En pocas palabras que sea TODO TERRENO, a la cual puedas llevar a jugar paintball y a cenar en el Hilton y nunca perderá el "glamour".
Las mujeres en cambio buscan (me excluyo porque pienso que soy un poco rara en este tema) un hombre atento, que no diga malas palabras, que sea inteligente, divertido, caballeroso, detallista, que recuerde fechas importantes y que le caiga bien a sus amigas. Que busque un futuro junto con ella, que sea emprendedor y ambicioso. Y si, por encima de todo esto no la cuernea, obviamente es un "plus".
¿Les gustó lo que acabo de escribir? Pues, ¡estamos todos mal!. Si se dan cuenta muchos se sentirán identificados con todo lo que acabo de describir. Claro, buscamos a la persona perfecta, que se ajuste lo más posible a nuestro estereotipo de belleza. No nos damos cuenta que estamos puntualizando exactamente lo que somos nosotros. Buscamos personas que bien podrían ser un reflejo de nuestras vidas. Por eso es que la mayoría de relaciones fracansan. Llega un punto en que lo similar aburre. Está bien que compartamos intereses pero, somos individuos, cada cual tiene un caracter, aspiraciones y pensamientos diferentes, no somos un colectivo zombie donde todos sentimos y pensamos exactamente de la misma manera.
Creo que la clave para cualquier relación es aceptar, comprender y aprender a amar. Y por último, si no te gusta esa persona con quién estás, ¿para qué sigues con ella/él?. Lo peor que se puede hacer es tratar de cambiarla para que se amolde a tus necesidades o vivir deseando que esa persona se vuelva otra. Vivir frustrado es lo peor que te puede suceder (I've been there), vivir queriendo escapar o que las cosas cambien radicalmente de un momento a otro. Cada cual tiene la capacidad de cambiarse a sí mismo. Tú no puedes cambiar a nadie más, esa persona debe querer cambiarse a sí mismo.
Aprendan a conocerse en vez de tratar de amoldarse el uno al otro...

Una vida recordando... (parte I)


Amanecía. El día frío le impedía despertar, mas tenía que hacerlo. Un día nuevo empezaba. Eran días llenos de esperanza, de expectativa. Los últimos días de esta etapa de su vida. Pronto acabaría la secundaría y le emocionaba pensar qué vendría después. Ya había tenido una pequeña prueba de lo que sería la vida “de adulto” ya que había aprobado el pre universitario el verano anterior.
Abrió los ojos y se quedó inmersa en sus propios recuerdos. Había encajado perfectamente en el mundo universitario. Ansiaba volcar sus dotes intelectuales en libros, códigos y leyes. Estudiaría Leyes; el sueño de casi toda su vida. Sí, como muchos niños, en algún momento quiso ser arqueóloga, concertista o directora de una orquesta, es verdad. Pero había decidido que las Leyes eran lo más apropiado para ella y para su padre.
Su padre era un hombre de baja estatura, trigueño, honesto, trabajador y con sus valores muy arraigados. Había sufrido una niñez muy dura, con siete hermanos, en un pueblo lejano a la ciudad donde, había ya, formado una familia. Él había viajado por América Latina fugado de su casa. Había visto todos los aspectos buenos y malos de la vida. Había hecho teatro, artesanías, panadería y un sinfin de oficios que le permitieran vivir día a día en sus incontables viajes. Al fin de su trayectoria había decidido enseñar. Era maestro. Por esta razón habría de enloquecer si su primera y única hija le dijera, tal vez, que quería ser catriz o que quería dedicar su vida a la música, o a viajar como él lo había hecho. Siempre buscó lo mejor para sus dos hijos. Les dió la estabilidad económica que él nunca tuvo. Mas había descuidado un poco el trato con ellos. Casi no pasaba en casa y rara vez les hablaba...
continuará...

Revolución Musical

Luego de haber estudiado apreciación musical desde los 7 años puedo afirmar que tengo un oido bien "amaestrado". Me gusta todo tipo de música y al decir todo me refiero a todo, menos bachata y metal. (risa ligera). A medida que va pasando el tiempo la música va cumpliendo una seudo evolución. Artistas nuevos, que cada vez comienzan más jóvenes, toman elementos de los grandes maestros de la música para desprestigiar, en opiniones de muchos, el buen nombre de la música. Justin Bieber, Jonas Brothers, Miley Cyrus, Demi Lovato y Lady Gaga se han convertido en una antítesis de lo que, muchos hemos considerado en algún momento de nuestras vidas, lo mejor de todos los tiempos.
Yo, personalmente, crecí con una mezcla bohemia y rockera de mis dos padres. Mi ipod bien podría ser considerado un patrimonio de la humanidad. Escucho música dependiendo a mis estados de ánimo (multiples personalidades). Tengo Playlist q van desde "para llorar/corta venas", abarcando todo un repertorio de canciones románticas con artistas como Arjona, Sanz, Montaner, etc; "rock" conpilando algunos géneros, donde tengo aerosmith, The ramones, Linkin Park, Led Zepellin y un sinúmero de bandas. Tal vez es difícil para algunos entender como puedo tener gustos tan variados. No nos damos cuenta que nos encasillamos automáticamente en grupos y nos ponemos etiquetas según la música que escuchamos: rockero, punkero, emo, romantico, reggaetonero. Pues si pudiera ponerme un "label" por el tipo de canciones que escucho, no podría.
Como todos, mi vida ha tenido varias etapas, y en cada momento significativo ha habido algún género musical de sountrack. No sé por qué pero mi mente es muy cinematográfica y, cada situación, lugar o emoción se han visto representadas por temas de background. Canciones muy diferentes una de la otra. Artistas completamente antagónigos unos con otros. Hay gente que no entiende como entre mis bibliotecas puedo tener Paramore y Miley Cyrus al mismo tiempo. Y el origen de esta cuestión radica en mi instrucción musical. Siento especial atracción en las melodias por encima de géneros y artistas. Tengo un especial gusto por cambios en ritmos, puentes y la combinación de bemoles y sostenidos. Para los que entienden poco de estructura musical todo esto se resume en melodías que no se encuentran en tonos comunes. Melodías más agridulces por así decirlo. Hay elementos de cada artista que me llaman la atención. Me encanta la creatividad de Franz Ferdinand en cuanto a las melodias y los puentes, los cambios de ritmo, lo mismo con My Chemical Romance. Me gustan las letras un poco sínicas de The Killers. Y hasta me llaman la atención las metáforas y los juegos de palabras que utiliza Lady Gaga en sus letras.
Por ejemplo, la canción "He could be the one" de Mliley Cyrus (probablemente no la habrán escuchado). Una canción básicamente pop. Comencemos con que es una canción netamente adolescente y, aunque no me gusta admitirlo, me da nostalgia recordar esa etapa de mi vida. La letra es muy básica pero ataca puntualmente lo que sientes cuando tienes una ilusion sin pasarse a la cursilería. Musicalmente la guitarra y la bateria le dan un toque medio rockero y el ritmo la hace un poco más upbeat. Casi al final de la canción tiene un enganche que cambia completamente la melodía y el ritmo de la canción lo que la hace no ser monótona.
Bueno ya saben lo que dicen a cerca de los gustos. Hay personas que no comparten muchos pensamientos, eso no quiere decir que alguno este errado, simplemente quiere decir que son diferentes. Realmente creo que los seudo artistas de ahora se enfocan en ganar audiencia creando temas más comerciales y lo hacen bien. Pero de vez en cuando hay temas que vale la pena escuchar simplemente para el propósito de la investigación (jaja). Hay miles de bandas allá afuera y todas merecen el beneficio de la duda. Para mi no habrá artistas más grandes que Queen, Aerosmith, The Beatles, Silvio Rodriguez o Joaquín Sabina. ¿Qué crees tú?

viernes, 5 de noviembre de 2010

¿Quién soy?

Mucha gente se pregunta quién soy yo. Un nombre, una edad, un estado civil, no lograrían definirme nunca. La situación en la que me encuentro no etiqueta mi forma de pensar o mi forma de ser. Mi forma de comportarme o escribir no trasciende realmente en todo lo que tengo regado en la mente.
El título del blog: viaje al centro de una mente complicada; se refiere a un enlace a la mente casi femenina de este pequeño humano. Pensamientos, sentimientos, comportamientos, un poco bizarros, diferentes y a veces hasta destructivos. Todo lo que cabe en el cerebro de una mujer, catalogada asi por la sociedad.
En resumen esta soy yo. Una mujer un poco diferente, un poco loca...